Crónica de un encuentro artístico sobre migraciones en Estella-Lizarra
Viernes 10 de diciembre de 2021. Jornada de temporal en Navarra. La mayor crecida de sus ríos en 20 años. Minuto a minuto, las radios anunciaban que la cresta de la riada estaba por llegar a Estella-Lizarra. En el Espacio Cultural Los Llanos todo estaba listo para el encuentro. Fuera, el viento y la lluvia presagiaban la cancelación. Dentro, la fuerza migrante no cedió.
A las 18.15 horas, apenas unos minutos después de lo previsto, comenzó el I Encuentro Estatal de Mujeres Migrantes Valientes y Talentosas, la primera edición de una cita que propone poner el foco en los aportes culturales,artísticos e intelectuales de mujeres de otros orígenes que viven en España e inciden en diferentes ámbitos sociales.
Las protagonistas del MIVaT 2021 han sido la artista multidisciplinar colombiana Zarys Falcón y la bailarina Galina Rodriguez, la escritora y periodista ecuatoriana María Fernanda Ampuero, Anna Isabel Bueriberi, jefa de comunicación de Afroféminas, medio de comunicación en español antirracista y feminista negro, y Ana Laura Duarte, encargada del catering artístico “Memorias culinarias de nuestros orígenes”, que puso cierre al evento con un juego entre sabores e ingredientes que hacen parte de nuestra identidad.

MIVaT es una iniciativa del Área de Empleo, Migración y Diversidad Cultural del Ayuntamiento de Estella-Lizarra, a cargo de la concejala Magdalena Hernández Salazar, que surge del Diagnóstico y Plan de Acción en materia de migraciones realizado el año pasado y cuenta con el apoyo del Departamento de Políticas Migratorias y Justicia del Gobierno de Navarra y la asistencia técnica de Equala Iniciativas.
Valientes y Talentosas
En la apertura, Vanina Vázquez, de Equala Iniciativas, explicó el porqué del título del encuentro: decimos mujeres valientes porque si bien asociamos “siempre la valentía a acciones heroicas, existe una cotidianeidad habitada por pequeños actos que requieren de nuestro valor. Subir a un avión, pasar una frontera, llegar a una ciudad, transitar sus calles y buscar donde dormir, experimentar el rechazo, la aceptación, extrañarse de los aromas o paisajes se transforma en una empresa compleja”. Al tiempo que hablamos de mujeres talentosas porque “al migrar dejamos que emerja todo eso que no sabíamos que teníamos dentro. Traemos cosas y despertamos también a la experiencia de lo desconocido”.
Las diversas disciplinas presentes en el escenario -desde la perfomance y la comunicación hasta la literatura y los sabores- han sido vehículo para poner de relieve la posición marginal que la sociedad está dispuesta a dar a las personas migrantes.

La propuesta de cruce entre música, danza y palabras fue hilada por el grito, el canto y el baile en tres actos de Zarys, Galina y el colectivo Katanga. Su performance Voces Errantes expone en su poética la experiencia de diversos tránsitos psíquicos que se dan en la reconfiguración de la identidad personal luego de un proceso migratorio. Las voces han sido gritos, expresiones de duelo, palabras y canciones a un futuro posible.

Ante el grupo de valientes asistentes, Ana Bueriberi, de Afroféminas, se centró en cómo conversar deconstruyendo prejuicios Explicó en qué consiste la interseccionalidad y desmontó mitos y gestos racistas. Con sus pistas para encontrar palabras adecuadas para un uso de lenguaje inclusivo y no discriminatorio, propuso dejar de usar términos como “color piel”, “ir al chino”, “mulato”, “denigrar” -que en latín significa “poner negro”- y muchas otras de uso cotidiano. Y sorprendió al público con la pregunta “¿Qué soy para vosotros? ¿Cómo me describiríais?” y su respuesta, tan simple:
“Yo me considero una mujer negra”.
Hacia el final fue el turno de la escritora María Fernanda Ampuero, autora de los libros Pelea de Gallos y Sacrificios Humanos, con relatos donde mira la otredad con una incomodidad que toca el cuerpo, desde lo particular, pero con eso común que, como ella dice, “nos convierte a todas en la posibilidad de ser demonio para alguien”. Ampuero dijo “al contrario de Umbral, yo no he venido aquí a hablar de mis libros” y, en cambio, reflexionó sobre el lugar de las personas migrantes en la sociedad española, “una sociedad con un montón de gente con miedo y necesidad de comer y de dar de comer a los que están del otro lado, una sociedad que se enriquece a costa de quienes están en la economía sumergida”.

Mientras aclaró que “ser inmigrante sin documento es una falta administrativa, no legal”, esta creadora de personajes que intentan vivir y sobrevivir en los márgenes, recordó que “una de las cosas más importantes de la vida de este país como es el cuidado de las personas –nuestros hijos e hijas y nuestras madres y padres-, lo han hecho y siguen haciendo desde hace mucho tiempo las mujeres extranjeras”.
Balance y futuro
El encuentro MIVaT ha dado la posibilidad de pensar en forma colectiva cuáles son los itinerarios y las realidades de las personas migrantes que sistemáticamente, son invisibilizadas. La organización se mostró satisfecha con la participación de las personas que pudieron compartir una tarde diferente y con “todo lo que hemos podido vivir gracias al talento y al arte de todas estas mujeres”.
Queda la importante y urgente tarea de responsabilizarnos sobre la situación que viven muchísimas personas en nuestra sociedad, que son explotadas, marginadas e imposibilitadas de acceder a sus derechos como seres humanos. Será hora de empezar a pensar en el II Encuentro MIVaT y sus protagonistas.
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